15/6/09

LA TIERRA, ESA ASTRONAVE

Por Sebastián Estradé *



La bandera no implica reconocimiento alguno de soberanía (Foto NASA)


Dar Testimonio

Se celebró en Bruselas el Congreso de la Federación Internacional de Astronáutica.
La posibilidad de vida extraterrestre apasiona no ya a los fantasiosos, sino a los científicos (y en) Biurakán, República Socialista de Armenia, se celebró el Simposio Internacional soviético- americano. Una de las conclusiones reza: “Es improbable que no existan civilizaciones extraterrenas, por lo que es más probable que existan”.

El Tratado URSS- USA de cooperación espacial funciona. Están intercambiando la información que se recibe del planeta rojo, sin pretender hallar a los llamados hombrecillos verdes de Marte que fueron los héroes de la imaginación, y algo más, del pasado siglo. También han celebrado, con cooperación de otras naciones, el IV Simposio sobre “El hombre y el cosmos”, en Breván (para variar en la Unión Soviética) y estudian las posibilidades de que el hombre se adapte a las condiciones precisas para hacer factible el viaje sideral.

La NASA ha dicho que Apolo 16 partirá para la Luna el día 17 de Marzo que alunizará en la Zona de Descartes, altamente accidentada. Y para que no se diga que sólo damos testimonio de lo que ha sido.

Coloquio sobre propiedad en la luna

Lo convocó la Embajada de la República Argentina (y cito) al buen amigo, gran camarada y compañero, jurista de talla sin par, volcado al espacio y a su problemática, Aldo Armando Cocca, porque a él le preguntamos:

- Pero, bueno, profesor Cocca ¿es que es necesario hablar de propiedad en la Luna?

- Cierto que sí –contesta el amigo, con un ligero modular que le caracteriza y que le define como buen patriota de su tierra-. Y ya existe una expresión de derecho de propiedad en ella, como son los artefactos dejados en el suelo selenita por los Estados Unidos y por la Unión Soviética.

Además, pronto se contará con estaciones, tripuladas o no, y otras construcciones en la Luna, aparte que se contará también con sus recursos naturales.
Parte de los cuales han sido extraídos y también, ¡cómo no! transportados a la Tierra.

- Nos habla sobre las piedras lunares (…) que los norteamericanos han distribuido un total de 3 kilogramos, procedentes de Apolo 15, entre 201 investigadores de los Estados Unidos, de la Organización Internacional ESRO y de 15 países más. Y a nosotros (…) no nos ha tocado nada en ese reparto.

- Poquito les ha tocado a los demás pero (...) hemos entrado en otros repartos.

- ¿Qué régimen de propiedad tienen los vehículos, las estaciones a construirse y los recursos naturales?

- Los vehículos espaciales, sus componentes y todo otro objeto lanzado al espacio ultraterrestre con destino a la Luna u otros cuerpos celestes, con inclusión de los que hayan descendido en ellos, o regresen a la Tierra, seguirán a sometidos al régimen jurídico anterior al lanzamiento; es decir, no se modifica su estatuto de propiedad. Con relación a las estaciones espaciales, equipo y objetos construidos en la Luna o en cualquier otro cuerpo celeste, cabe decir que pertenecerán en propiedad a su constructor, aunque se haya empleado material originario de la Luna, o de los cuerpos celestes.

- ¿Qué nos dices en cuanto a los recursos naturales?

- Los recursos naturales de la Luna y otros cuerpos celestes constituyen un patrimonio común de la Humanidad.




Foto de la superficie de la Luna (bajada de Google)

- Conste que te hice una pregunta con alguna malicia, pero, ¡claro! Tú no ibas a patinar. Sin embargo… ¿qué se entiende por recursos naturales?

- No solamente es considerado recurso natural todo material originario de la Luna o de otro cuerpo celeste, sino que también todo aprovechamiento posible, como por ejemplo cualquier utilidad desde la Luna o en la Luna, o en otro cuerpo celeste, en las comunicaciones, energías u otros análogos.

-Ahí… ¡Ahí empezamos la trinca! Yo construyo en la Luna un habitáculo con materiales que pertenecen a la comunidad humana y, una vez transformados me agencio su propiedad, con lo que valga una nueva pregunta: ¿Se pueden consumir los recursos naturales de la Luna?

- Nada conmueve a Cocca. Y contesta: La utilización y aprovechamiento en la Luna de los recursos naturales serán legítimos, siempre que se hagan con fines lícitos, y de modo no abusivo, ni que perjudique los mismos derechos de los demás.

-Bueno… bueno. Pero ¿quién calibra lo que es lícito y lo que no lo es? Por lo tanto… ¿no crees que habrá conflictos en el futuro?

Conflictos y aventuras

El profesor Cocca contesta sin pensarlo dos veces. - Puede haberlos. Por ello se propone la creación de una Autoridad Internacional que, en nombre de la Humanidad, cuente con las normas y preceptos legales que sean menester para ordenar las actividades en la Luna, y al mismo tiempo con capacidad para resolver los conflictos que puedan presentarse.

- Amigo Cocca (….) ¿Cómo te imaginas una Luna habitada… o explotada?

-Sonríe, medita, junta las manos rozando su barbilla y dice: La Luna… no la veo como una gran ciudad. No la veo con grandes núcleos urbanos. Más bien la veo como un complejo científico, con multitud de laboratorios y con alguna actividad industrial. Y como la Luna no presenta un medio ambiente fácil al hombre, entiendo que muchas de esas instalaciones y fábricas serán automáticas.

- Y… ¿sobre qué fechas crees que se viajará, con la comodidad de un pasajero aeronáutico, hasta la mismísima Luna?

-¡En esta década! –Lo dice con toda convicción. –Advirtiendo que la nave espacial, por su comodidad, será lo que servirá de hábitad del viajero durante su permanencia en el satélite. De modo que no hay que pensar en hoteles u otras construcciones para alojar al viajero de la Tierra, por lo menos durante una primera etapa de esos viajes a la Luna.

La vida extraterrena

Es curioso. Con tanto hablar de piedras lunares y la NASA no se conforma con ellas. Y con analizarlas. En efecto, se han extendido a más y han realizado nuevos análisis sobre un meteorito famoso, el llamado Orgueil, que cayera en Francia hace más de un siglo, concretamente en el año 1864. Los expertos de Ames Research Center informan que los análisis que hicieron sobre éste (…) han identificado en él seis aminoácidos, incluído una serie de 18 que antes fueron identificados en dos meteoritos famosos, el Murchison y el Murray. Y afirma el Dr. Cyril Ponnamperuna, del centro AMES, que tales aminoácidos son de origen extraterrestre.

Aminoácidos y piramiditas, presentes en el regalo de los cielos, el meteorito de Orgueil, distintos a congéneres moleculares terrestres, pero como ellos, unidades químicas con las que se componen las proteínas, parte fundamental de todas las células vivas, son, un testimonio fehaciente, de que la vida no es, un fenómeno reservado al pequeño planeta Tierra.

* Fragmentos tomados de la nota realizada por el periodista Sebastián Estradé para la revista juvenil femenina: PRIMAVERA. Nro. 64. Enero 1972. Págs. 4, 5, 6 y 7.

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